Fantasías

Descubrir y descubrir

Y no parar de descubrir, 

como un tierno y enajenado desquiciado, como un loco por la fiebre del oro;

con el corazón iluminado

cual farol en mano, 

latiendo cada vez más encandilado;

tentando casi a ciegas por las rutas y grutas de tu piel;

desabrigando lo abrigado,

liberando lo aprisionado

Descubriendo, descubriendo

Tan solo descubriendo. 

Sabido y confiado

con calma y paciencia

del que busca y encuentra

Sabido de las gemas 

que esperan de un profanador, 

de un alquimista que todo lo ve oro.

M.E.

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Nací en tu corazón

Nací en tu corazón

En el centro de tus emociones

 Amores

Entre sus sonrojados latidos

En el paraíso de mis sueños

Cobijado en sus caricias

 Entre dos bellos soles

Nací en tu corazón

En el jardín de tus flores meninas e intuiciones

Entre Suaves

 Dulces Ilusiones

Nací en tu corazón

En medio de sus cálidos y delicados calores

Aquellos que descubres para mí

Cuando vuelas en las nubes

Sublimes tentaciones

Que abrazan mis más desarropados anhelos

Cubriéndolos entre encantos

Cuna de todos mis deseos

Nací en tu corazón

Desnudo

Caliente

Como beso ardiente

Abrigado entre tus frutos

Cual sol naciente

Entre gentiles montes de rosados colores

Nací en tu corazón

Protegido con recelo

Al  amparo de sus delicias

En tierno

Ardiente cofre

Bello y bondadoso cielo.

Miguel Eduardo Valdivia carrera
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Del paraíso al cielo

Del paraíso al cielo

La ruta de tu piel

El Sendero suave

Por tu cuello

De mis besos peregrinos

Sublime arroyuelo

Perfumado camino de ensueño

Dócil precipicio

De nubes de algodón y fuego

Exquisito y divino descenso

Del paraíso al cielo

Laderas, declives

Dulce túnica

De piel y miel

De jazmines, rosas y bombones

Desfiladero hermoso

Sendero de antorchas

En el que arden mis labios

Y tiemblan tus ruegos

Ruta

Consagrada de favores

A tus súplicas y sonrisas

Al encuentro de nuestros versos

A un bello

Camino de temblores

Al equinoccio de tus gracias

Al solsticio de tu luz

Del paraíso al cielo.

Miguel Eduardo Valdivia Carrera

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En tus estrellas

En tus estrellas

Hoy mi alma viajo al espacio,

a la inmensidad de todo tu universo.

También fui una gota

en el mar, en las olas

En las sonrisas de tus aureolas.

Viaje por estrellas

Centellas y arroyuelos.

Vi galaxias nacer tras mis besos 

Flores inundando mis versos

Yo una luciérnaga danzando en tu infinito

Un explorador errante, un astronauta fugaz y fortuito.

 Descubrí tus soles

aquellos dulces amores

fui unicornio alado

recorriendo fauces, comisuras

constelaciones

cabalgando a tu ritmo

por las nubes 

 astros, osas mayores.

Revelaste para mí

A leo, a virgo

  libra y géminis

Yo fui tauro, capricornio:

un piscis en tu acuario.

En tu piel, suave cosmos perfumado.

Hoy mi alma viajo al espacio,

a la inmensidad de todo tu universo.

Hoy siento que la luna

Coquetea con el sol

Y que cada que nace un sol, una estrella

Mi espíritu... vuela.

M.E. 

Enséname a orar

Enséname a orar

A rezar entre tus muslos

A rendir mis rodillas ante tu religión

A buscar compasión entre tus piernas.

Enséname a orar

A recorrer a besos aquella suavidad que resguarda tu capilla

Aquel sacro convento de mi adoración

La flor divina, de mis plegarias a dios.

Enséname a orar

A buscar calor en los perfumes de tu ser

A convertir mis suplicas en sonrisas de placer

A susurrarte mis pecados

A ver tu reino celestial.

Enséname a orar

A buscar entre tus pétalos tu divinidad

A ser tu santo y pecador

A descubrir el brillo de tu crucifijo sagrado,

 la luz que enciende tu placer.

Enséname a orar

A encontrar el corazón de tu espíritu

A confesar en mil lenguas mi amor

A retornarte al cielo.

Enséname a orar

A acariciarme en tu alma

Sucumbir en tu edén.

Enséname a orar 

A abrir tus alas y volar.

M.E.

DIC 2012

Una rosa un botón

Pétalos pasión

Labios tus rojos

Ojos tus labios

Rojos tus fuegos

Guarida de mi sangre

Sueños de mis sueños

Versos de fuego, tu silueta en carmesí

El calor de tu cedro, tus flores hacia mí

Tormenta en tus venas, la fogata que encendiste para mí

Anhelante anhelo 

Mirar mi alegría en tu mirada

Ser piel de tu piel

Palpitar a tus ritmos, volar en tus fuegos

Ver mi pasión en tus ojos

Tu contento en mi alma

 Ser velero en tus mares

 Alquimista en tu espalda

 Dulce espina de aquel placer inconfesado

 Una lagrima en tus mejillas

 Pasión encarnada

 Una rosa un botón

 Pétalos pasión

 Deseante deseo

 Ser el dueño de tus gemidos

 El dios de tus rezos

 Sangrar en tus sangres

 ¡Ver el cielo!

SilenciO

Silencio...

Cuando abro los ojos y veo tu hermosura

de pie, iluminada, envuelta en la tibieza, las caricias del sol.

Cuando pienso... siento... quiero... tan solo tu amor.

Silencio...

Cuando te vistes, cuando ya extraño tu calor.

Las nostalgias de un fuego

Los versos de dios.

Silencio...

Cuando mi alma respira tu sol

Cuando tus recuerdos perfuman mi vida

Cuando tus besos aun saben a mí.

Silencio...

Cundo en tu sonrisa soy feliz.

Cuando en tus ojos, inmortal.

Cuando en tu pecho, tu amor.

Silencio...

Cuando contemplo tu silueta

Cuando deseo todo de ti.

Cuando tu amor lleva mi nombre y el tuyo mi amor.

M.E.

tU lUz

Es tu luz la que a través de tus pupilas acaricia mis lágrimas.  

Vida la que me das de beber en tus labios.

El vino con el cual me encantas.

Sé que tu alma y la mía jugaron, al amor, !a ser Dios! en las sábanas de la Osa Mayor.

Que tus sonrisas y las mías se vistieron de ocaso y amanecer.

Que cuando estabas en celo, fuiste mi mujer.

Hoy busco, en el azul infinito, el calor de tu amor.

De lunes a sábado, fuiste sendero; el domingo el cielo mio.

Hallé tus tiernas pecas en las mil gotas del rocío, 

mapa cardinal hacia tu nuez;

semilla sublime, faro del navío perdido de mis anhelos.

unico cáliz de mi fe.

Luciérnagas, de chocolate y miel, habitan en mis víceras, revolotean en mi corazón.

Una ves miré al cielo y encontré en él tus pupilas. 

Una vez fuiste tormenta en mi sangre, arolluelo en mis días de duelo.

Es tu espíritu el alimento de mi alma,

tu piel, voluntad ciega de mis versos.

Tu mirada serena, el sí a todos y cada uno de mis deseos,

vitral de fuego, también de calma; esa luz que mi étero ama.

Tus risos traviesos,

el juego innato entre mis dedos.

No eres mi vida,

eres el aire que mi corazón respira.

Reina de cOrazOnes

Qué bello es amarte cuando me amas
Sembrar mis besos en el cielo de tu piel
Sentir el perfume de tu miel
Hermoso... hervir en tus llamas

Qué sublime embriagarme en tus flores
Ver luces ¡estrellas! en tus ojos
sentir el temblor de tus labios rojos
Saciarme infinitamente en tus sabores

Qué precioso es llenarte de besos
Bailar juntos en la luna llena de nuestros placeres
Saberme rey de tus dulces favores
Peón, esclavo, eterno de tus deliciosos amores

Que divino es rezarte
Susurrarte Versos sucios endiablados
de pasión, embelesados
Descubrirte, poco a poco...sentir tus labios ¡excitarte!

¡Qué bello es amarte cuando me amas!
Vivir eternamente preso en tus amores
Junto al abrigo tierno de aquellos...
...dos suaves corazones.

Alas del cielo

Una noche...
llegué cansado...triste, muy, de tanto extrañarte
Y tus alitas me abrieron tu alma
Y dentro de ella yo quise estar
Y porque afuera era frio
Pero dentro...
tierno, anhelante, tu calor.

Y tu alma
recibió a la mía
y juntas
se besaron
Una y otra vez
llenas de amor, se acariciaron
Y otra y otra vez
¡Y muchas veces más!
Apasionadamente Se besaron
Y tus suaves, vigorosas, alitas se asieron temblorosas a mí
Y
un firmamento entero de estrellas
Palpitó, estalló resplandeciendo, divinamente,
en nuestros desenfrenados corazones.
Entonces
Tus alitas, aún más, fuerte, fuerte, me abrazaron
Y
¡Vibraste!, ¡vibraste!
iluminando mi espíritu
Consumiendo toda mi pena, alegrando todo mi ser.

Rezándote al oído

Soy deseo puro naciendo en tus ojos,

despertando en tu mirada,
ardiendo por tus labios,
anhelando el dulce néctar de tu boca.

Cómo despiertas oh! nena mis pasiones.
Son tus ojos dulce cáliz, tentación.
Tus labios pecado, pasión! que me lleva a la locura.

Quiero perderme en tu mirada, !tocar el cielo!
abrazado a ti, por detrás de tu cintura,
respirando los perfumes de tu cuerpo,
acariciado por las alas de tu ser.

!Mirar a Dios! aferrado a tu silueta
ceñido a tus caderas, halagado por tus suaves nalgas,
rezándote al oído...
palabras de amor.

vOlando...

Entre perfumes te vi llegar,
danzando entre flores, alegrías.
Tu figura, mi paraíso, mi Edén
y
Tu mano acaricio mi rostro,
dibujando mi sonrisa en el aire,
mis manos leyeron tu calor,
tus senos se cobijaron en mi pecho.
y
Nuestros corazones se hablaron,
susurrándose deseos, pidiéndose amor.
Un halo de luz unió nuestras almas, nuestras pieles.
y
bebí de tus labios y me embriagué de tu miel
sin conciencia de pecado, sin pedir disculpas, sin importarme los juicios,
escribiendo un poema en cada beso,
mirándome en tus ojos
y
viajando los dos a las estrellas,
tu ceñida por mis brazos y yo ceñido por tus piernas.
Y nunca antes ni después volé tan alto ni llegué más lejos.

un beso de tu alma

Noche azul, verano en ocaso
brisa cálida, trae tu aroma
ilusión, deseo...
...cálido arroyuelo

Mi cuerpo: tranquilo, acurrucado, desnudo.
tu luz enciende mi alma
tu brillo nubla mis penas
tu alma, acariciando mi espíritu.

Abrazo mi almohada
Busco a ciegas tu calor
quedo dormido...
La luna se ilumina en tus ojos,
Las estrellas, en tus labios, en tu sonrisa.

Mis anhelos esculpieron tu amor, tu dulce silueta,
tu sabor, tu dulzura,
tu embriagante figura.

Tus besos me permitieron amarte.
Mi sueño, nuestro amor, es así: una luz de ilusión...
...ardiente, encendida: una fogata en mi corazón.
Porque tú...
me dejaste sonrojarte, otra vez piel a piel, adorarte.
Mañana al despertar... mi espíritu palpitara danzante
Mañana al despertar , al alba...
sabré a que sabe
un beso de tu alma.

Mujer..

Mujer
Tú que caminas, Despaciiito, en mis sueños
Tú que sonríes y coqueteas, mimosa, en mis anhelos.
Dime si mis manos
se enredarán en las tuyas.
Dime si mis caricias
saciaran tus deseos.
Dime si mis labios
sabrán a los tuyos
Te amo de mil sabores.
Te quiero entre mis azufres... mis mieles.
Sonriente, desnuda, ardiente
danzando alegre y perfumada
Oh! Mujer, mujer amada
! Dame vida, ilusiones!!amor, esperanzas, pasiones...
!Un beso eterno, cargado y envuelto, en mil colores!

Pdta.> dime si las ondas de tus rubios cabellos acariciarán esta noche mi rostro.

En tUS BesOs

Envuelto en tus besos
Rezo tus versos
Cubierto en tu amor
Descubro una flor
A cada pálpito perdido
Una lágrima
A cada tierno deseo
Una plegaria al cielo.
Truzita roja, lazo blanco
Fantasía pura, sabanas frescas,
deseos sin espinas.
Un corazón de azúcar abraza el eco divino,
el palpitar amoroso, de tu alma;
seduce
las ilusiones eternas y sabias de mi espíritu.
Labios risueños, contentos, encantados,
míos
recorren el nirvana glorioso, divinamente hermoso, sabroso de tu cuerpo.
Soy ángel, soy demonio;
Soy el pétalo furtivo, caricia paciente, insolente que humedece tus más
Intimas plegarias.
Un año nuevo se descubre hoy
Un deseo pendiente
Anhelo ferviente
Amor, deseo.
Pasión
Tu espalda... acariciando mi pecho, mis manos en tu cintura
Roses de amor.
Mi alma... besando tu espíritu.

NatividaD

Tres magos, un deseo:
Amor
Índice, medio, anular
Te recorren, siguiendo una estrella, por las dunas de tu piel,
de tu sed, de tu cuerpo, divino, celestial.

Una estrella, un suspiro.
Un mismo camino.
Un beso, tu beso.
Solsticio de verano
Nacimiento, reencarnación.
¡Aleluya! Es navidad.

Cosechas en flor, frutos de miel
Cuerpo de mi cuerpo
Sangre de mi sangre
Redención de amor,
Torbellinos de pasión.

Mi pecado: amarte.
Mi Edén: tu angelical sonrisa, iluminarte.
Mil ilusiones, tras millones de pasiones
¿Verdaderas o santas?
Aromas a magia, misterio, en todas tus rosas, curvas y húmedos rincones. Mi corazón te siente, mi espíritu te sabe.

Dame esta de tu noche, noche buena,
dame de tu cáliz, dame de tu flor.
Dame de tus frutos: dame de tu amor.
Santa tu gema
Virgen tu pasión.

Encajes y pOrtaligas

Encajes y portaligas

Perfumes de piel

Aromas de amor

Tu calor , el mio: una tibia, ansiada noche.

Cuando tu mirar adorna mi alma

Mi corazón enternece

Pasión ,sexo, amor : mi espíritu amanece

Encajes y portaligas

Besos, roces, sublimes caricias: candor, calor

Abrazos fuertes llenos de amor.

Mil cielos pintas en mis sueños

Danzas coqueta...inquieta en mis coloridas fantasías, iluminando cada una de estas, sonrisas mías.

Sabes endulzar todas cada una de mis pasiones.

Las haces realidad: febriles ilusiones.

Esta noche,

búhos aplauden y cantan tus encantos.

Traviesas luciérnagas bailan, luciéndose a tu ritmo:

 al compás de nuestros acelerados, coordinados corazones.

Esta noche fresca,

la luna,

dibujada por el deseo de un curioso gorrión de pecho rojo,

nos observa desde arriba, y tú,

tú...

...solo mía.

OctOber

Luna en lo alto
Un caramelo toca a mi puerta
Eres tú
Vestida de negro, gótica vampira
Tus ojos negros, tus negros labios
Mi corazón Suspira
Esta noche, a merced de esta luna, seré tuyo...serás mía.

Besos de fuego, almas en llamas
Labios, caricias
Pasión
Entras por mis ojos, vives en mis sueños
Recorro tu piel, suave, tersa: desnuda. Navego en tus anhelos, en tus senos... los hago míos.
Tus colmillos, labios complacientes; tus uñas, largas cual garras, me recorren, erizan cada uno de mis bellos
Devoras en mí, tus más oscuros deseos.

Esta noche la luna nos esparce mil encantos;
nos susurra permisos prohibidos... nada santos.

Un aúllo, Un gemido.
Unos pétalos, una flor...es tu perfume cáliz de mi sed.
Sesenta y nueve estrellas; resplandecen en nuestros cuerpos; siluetas sin pecado
Un lobo, una vampira
Un farol encendido

Lo cobijas, te ilumina: le das la bienvenida.
En tus delicadas fauces, Se arrulla, se súper anima.
Juegas en su brillo, con su luz; sientes mis versos; abres tus alas: te echas a volar.

Un búho, una lechuza... ¡elevándose!, volando: ¡disfrutando!
Ultrajando todas las penitencias, los velos, de la noche: Espíritus inquietos.
Una lobo, una vampira montados en encanto
Sobre nubes llenas de miel, Mojados, mutuamente como locos poseídos, cabalgando
Ecos de placer, tras cortinas boreales...Infinitos.

Silencio...
Los grillos cantan.
Luna llena en lo alto...Es halloween.

Tú, mi religión

“Amarás a Dios por sobre todas las cosas”
Impone un mandamiento
Más...
Tu corazón, mi templo.
Tu piel, mi fe.
Tus ojos, mi destino.
Tus labios, mi vida.
El no amarte... todos mis infiernos
Campanas de gloria, gozo y alegría, tus latidos.

Vuelan al cielo, mis plegarias, besando nubes
Sintiendo cielos.

Mis pedidos, son te quieros.
Mis gracias... tu rubor, tus sonrisas; tus suaves caricias.
Mis rezos, un infinito, un sentido, te amo.

Oh! reina linda, diosita bella.

Ante ti, me arrodillo.
Tu sexo, mi iglesia.
Tus piernas, puertas de compasión dispuestas a mostrarme el paraíso:
todas tus gracias.

Oh! reina linda, diosita bella.

Son tus senos, mis codicias: mis pecados.
Pecar mil veces, deseo; recibir tus tiernos perdones: sonrojadas, sensibles, dilatadas aureolas. Qué placer.
Besar pecados, rendirme ante sus suaves, erguidas, ‘adorables’ glorias.
Son ellos, tus senos, el maná que alimenta mis ruegos, mis más de mil deseos.

Oh! reina linda, diosita bella.

Cómo amarte menos, si te siento danzando en mi alma.
recitándome al oído
todas mis dulces penitencias,
exquisito castigo.
Amarte, mi sacro-oficio...del anochecer, del ángelus, al alba.

PortandO una rOsa

Desnuda viniste, portando una rosa...
...perfecta de Dios, rosa roja.

Rosa pomposa
Tú, mi flor sublime... hermosa.

Cielo bonito; paraíso, cosita de Dios, !Cielos! primorosa
Caminaste sinuosa, me miraste codiciosa.
Empinaste tus encantos. Tú goce coqueto, ver mi sed, mi mirada ansiosa.
Ganosita, tú, fuiste un angel inquieto sobre sutiles pasos en terciopelo.

giraste, danzante, en puntitas te empinaste
Levaste, meneaste

encarnaste...

...mil tensiones: deseo, amor. Eden sin espinas.

Versos de piel, liberaste perfumes, florecesiste mis mil paraísos.
Colores, brillos, latidos miles, flores en mis risas... petunias en las tuyas.
Caricias, suspiros en tus exquisitas curvaturas.

Me entregaste un beso: tu rosa
en fragancias de carmín y frambuesa.
Primorosa.

pompita hermosa

Derrier alegre, suave, bonito
Lozano, silvestre.
Juventud servida, postre sonriente: exquisito.
Nalgas coquetas... traviesas, curvaturas bellas,
suaves, deliciosas. Mías...tuyas.

sonrojadita manzana, fruto radiante, lozano,expuesto, nunca más prohibido.

Melocotoncito mío.
Rosa divina... pétalos bellos.

Colita bonita, derrier en rosa...
...rojas son tus rosas.
Rojos mis deseos.

Una lUz en tU ventana.

Una luz en tu ventana
Tarde de otoño
Aromas de fuego, recuerdos de amor
El sol abriga, calienta tu piel desnuda -tus mejillas, tus labios,
tus hombros y tus senos- tu piel desnuda.
Recuerdos de pasión, de caricias, vino, deseo y tentación.
Juegos de dos.

Anoche
me tuviste entre tus flores, entre tu miel
Entre tus brazos y besos
Anoche tus labios fueron míos y los míos tuyos.
Anoche
el cáliz de tu lámpara se iluminó, se hizo vapor, fluido en tus siluetas,
entre tus sonrisas y gemidos.
Anoche ...
...tu ardentía encendió mi espíritu, mi alma;
alegró mi cuerpo.
Contentó mi penas.

Ahora tu mirada se pierde en recuerdos, en aquellas dulces fantasías
que fueron tuyas, que fueron mías.
Ahora el calor del sol, la luz del día entra por tu ventana,
nace sobre, el aun presente,
sentir de tus senos,
de tus labios.
Te cubre de anhelos, de ansias, deseos;
de apetencias, suspiros; de remembranzas.
Suaves poros, tersos pezones
se acurrucan tiernos, sensibles.
Tu deseo no olvida
el sentir, el querer, el amar,
el volver a ser mía.

MitOs, muslOs y caderas

Una moneda se elevó y se elevó, del divino al cielo
Y al caer, elegiste ser mujer.
Sí el primero fue una bestia
Tú tenías que ser hermosa
Sí el primero era un salvaje
Tú tenías que ser preciosa
Ángeles y arcángeles se mostraron en celo.
Tu pecado, ser tentación, ser efímero velo

El cielo lloró tu partida
Llegaste en aires de primavera.
Lágrimas de nubes lavaron la tierra: tu hogar.
Tu corazón, manzana de amor
Como una colibrí: alegre, inquieta;
sexualmente traviesa, coqueta.

Ardiste los campos en fuego al avanzar
Todas las aves sintieron tu estar,
Volaron cantando, alborotando tus perfumados cabellos.
Te cubriste de cueros lisos, ceñidos a tu frágil, fértil figura
de nomos y duendes te fue obsequiada
Tal vestidura,

Así como calzados de taco y punta a cambio de un beso,
un mimo.
Sus encantos, un delirio, un magnífico verso

Sus sueños, impuras fantasías.
Excitados, embriagados en ansias
no les quedó más que Deleitarse
Empuñar sus lanzas
con sus febriles miradas tras tu caminar.

Caderas y muslos
por la noche oscura se deslizaron desnudos;
Se asomaron tiernamente en silencio rumbo a una triste fogata, a su encuentro con la pasión.
Allí estaba él, solitario, viendo las estrellas, esperando una razón.

Aquella silueta, aquella dulce escultura
Se hizo dueña de su bravura
Y su soledad, su infierno se iluminó de felicidad.
La tomo de las caderas, con firmeza e intensidad
y la hizo eternamente suya.

Mezclilla y piel

Mezclilla y piel.
Una silla de cedro, pisos de tabaco.
Tus jeans despojados de pudor esperan sobre esta.
Cortinas blancas acariciando el aire.
Tú, desnuda, sonriéndole a mi sonrisa
Tú, tan suave, rosando mi viril suavidad
Sábanas hechas nudos, enrolladas, serpentean nuestros cuerpos
Tus cabellos largos, pendulantes, danzan sobre mi pecho
esparciendo tus aromas,
acompañando tus miradas.
Pasión hirviente, juegos de amor

Caricias muchas, besos más.
Mil noches de espera, haciéndose realidad.
Mil noches de ansias, bordándose en hilos rojos

Roses suaves, intensiones intensas.
Tú en mí, yo en ti.
Un tren de hierro atraviesa la vía, retumba el cuarto,
agita la cama.
Su luz nos invade, nos hace resplandecer, vibrar.
Tu mirada llega al cielo,
la mía al paraíso.
Última parada, o el comienzo y despertar de otra.
Tiempo, más tiempo, un nuevo final.
Mezclilla Sube por tus piernas, no traías bombachas.
Un cierre se cierra.
Un beso, un adiós.
El tren espera otra luna llena en verano,
tu silueta en la vía;
otro encuentro, otra partida.
Y ante mis ojos...
Unos jeans que se van.

fantasía….ilusiones de pasión

Siluetas en fantasía….ilusiones de pasión y jazmín.
Si en tu caminar esta tu encanto, que dirían mis latidos al besarte,
mi pecho al cubrirte,
mis manos al descubrirte,
mi corazón de tanto desearte.
Desde mi lejanía veo el cuadro que proyecta en mis versos, tu caminar, tu belleza.
Tus caderas seduciendo mi alma por mera naturaleza.

Eres lo que más deseo. Y tu amor el edén que añora mi cuerpo… mi espíritu.

No camines demasiado, preciosa, por las nubes de mis sueños,
meneando esa colita, carnada, bonita,
porque ya te adoro con locura.
Esta locura que acelera la sangre de mis venas y eriza mi piel como animal jadeante de satisfacción, amor y ternura.

Eres miel, mi más exquisita presa. Aquella que sabe y me deja creer que la atrapo.
Cuando la presa, el atrapado, entre sus encantos siempre fui yo.

Eres dulce melodía de suavidades, aromas y dulces sabores.
Camina despacio, belleza mía, por que la vida es apenas…
…y yo apenas entiendo que más que tu placer
Lo que amo es tu pleno, fémino, ser.

Botón de cedrO, 0jal de miel.

Escóndeme allí
Guárdame del frio y de la pena;
De las sombras de hiel, de las olas del tedio y del desencanto
de no tenerte todo el tiempo.

Cobíjame
en tus abrazos, en tu amor.
Mímame con pétalos de ternura; con los aromas de tu alma.
Resguárdame de la soledad: envejece conmigo.
Haz de tu intimidad mi reino, mi lecho y mi cárcel de terciopelo.

Guárdame
Quiero vivir allí; respirar y morir
Para volver a vivir, sintiéndome tuyo
y tú mía una y otra vez.
Quiero ser eterno en ti… y solo contigo.

Bésame,
Estando húmedo… húmeda, con aquellos tibios labios que descubiertos del encaje, llenos de fantasía, esperan allí por mí.
Labios rojos, carnosos, tibios, amables pintados de latidos y sangre que devoran todas y cada una de mis lágrimas, llenándome de suspiros exhaustos de extrañarte.

Atesórame allí
en la profundidad de tus deseos
hasta que nuestras caricias se fundan en un solo llanto,
en un solo ocaso de miel, amor y pasión.

Cúbreme
enteramente y por completo
de tu dulzura y afecto divino, de mujer amante, recordándome
que cada día renazco, crezco
Y vivo…
para volver a morir y revivir
En ti.

MelOdías

Melodías de tu espíritu.

Grito ciego.
Torrente de amor.
Descubriste tu cuerpo,
anhelaste piel.

Descalza volaste por senderos húmedos.
Te perdiste, sonriente, en rojos y ojos de miradas que siempre pretendiste.

Fue entonces que abriste tus palmas al aire, y este te consintió perfumar corazones.

Tu nombre, ícono de placer, amor y tormento.
Azufre y miel
Cielos e infiernos
Diste sexo por amor y obtuviste amor por sexo.
Tu flor…un arma delicada
Tu presa… aquel que aprendió a amarte, se resigno a no entenderte.
Ya que de tu miel, se volvió adicto.

El tiempo, tu verdugo justiciero; tu dulce encanto, aliado de mil batallas.

Es tu alma el corazón de tu espíritu
y tu cuerpo, efímero canto de belleza.
Cuando abres tus ojos…
…se despierta mi amor inmenso.
Y cuando los cierras…
…te despiertas, amante, en todos mis sueños.

evA

Nunca vi tu rostro, pero me sonreíste.
Nunca vi tus ojos, pero me miraste.
Cual vino tinto, dulce, de ti me diste:
de tus labios, suavidades y mansas carnosidades;
de tu piel y de tu aroma de mujer.

Fuiste un caramelo, un perfume, un sol: un ángel.
Fuiste como el mar, como la luna.
Una suave brisa y un tornado.
Un manantial de amor aterciopelado.

Una muñeca con nalgas de corazón.
Un sediento y generoso, corazón acalorado.
Nos rendimos amor y permiso, para negarnos un perdón.
Al final un beso, una rosa, un te quiero y un gracias.
Y te guardaste mi corazón.

SenderOs de amOr

Tu mirada… mi primer beso
Tu sonrisa…alegrías en mi corazón
Tus ojos… el espejo de mi alma, la vitrina de la tuya: sendero de tu amor.
Tus labios…pasión de los míos.
Tu amor…una luna llena pintada de dulces colores, un sol que me cobija, el suspiro de mi espíritu.
Tus suaves manos en mi rostro,…poesía; en mi cuerpo… rimas, versos, canciones
Tus caricias, mis besos…hojas al viento, lloviznas de verano, suaves olas del mar, bendiciones de Dios.
Tu cuerpo, tu desnudes…el calor que abriga y enciende todos mis deseos.
Tus deseos…reflejo implícito de los míos propios.
Tu pasión…complemento: tormenta de besos, huracán de mimos, humedades hirvientes. Entregas que desconocen de límites, primas del infinito.
Tu amor…aquello por lo que nací, crecí, vivo y moriré.

Amarte al oídO

Quiero Susurrarte al oído
 que te quiero más que a mi alma.
Quiero soplarte caricias al oído
contarte cada deseo
 que el viento,tu silueta y tu perfume
 me hicieron imaginar contigo.
Quiero expresarte con ternura
 las mil maneras en que quiero que seas mía.
Quiero revelarte al oído
entre sábanas
 mis travesuras, anhelos: te fantaseé,
 te tuve en mis sueños.
Quiero suspirarte al oído
 todos mis apetitos, lujurias y cada una de mis más tórridas utopías,
  Quiero amarte al oído
 hasta que la luna le de la bienvenida al sol.
Quiero abrazarte y decirte cosas al oído…
…mientras te hago el amor.

QUisiera...

Quisiera…
Que la luna desnuda se pose y bese tu vientre;
que la blancura de tu lecho me llene de tus flores, colores y sabores;
de tus curvas y llanuras;
Y que el calor de mi fuego goloso empape tus orquídeas, tus pétalos y pistilos.
Quiero saciarme de tu polen y que un millón de estrellas estallen y resplandezcan entre mis manos;
Déjame ahogarme en la seducción de tus encantos
Y en la brisa de tus ansias, déjame nadar en el mar de tus sueños más íntimos
Deseo excitarme con tus sonrisas, sucumbir ante el brillo de tus mejillas
Y perderme ante el rojo color miel de tus labios pecadores.

Que tu piel me pinte las venas y tus besos se rindan a mi lujuria, a mis deseos.
Que el yugo de tus abrazos derrita mi amor y lo vuelva más que deseo;
Fúndete en mi espíritu
Derríteme en tu pecho y cobíjame exhausto en tu corazón.